Cusco, región que alberga el yacimiento gasífero de Camisea, veía, hasta hace muy poco, como el gas natural pasaba por su territorio rumbo a la costa sin poder utilizarlo.
Eso ha cambiado con la instalación, en 2020-2021, de los dos primeros grifos de gas natural vehicular (GNV) en la Ciudad Imperial, iniciativa de Pluspetrol, Lima Gas y el Gobierno Regional del Cusco, que hoy beneficia a 900 taxistas y a una industria, relató Pablo Saenz-Laguna, gerente general de Lima Gas Natural, en el foro Perú Energía Sur.
Objetivo inicial de ambas empresas es instalar tres grifos de GNV, el tercer de los cuales empezará a operaren Quillabamba a fines de este año.
Pero no piensan quedarse allí. Su siguiente paso es llevar los beneficios del gas natural al transporte de pasajeros y a los hogares cusqueños en el corto plazo.
“Ahora estamos trabajando para que, dentro de este año 2022, tengamos gas natural en el transporte público cusqueño (buses). Y el otro proyecto consiste en aprovechar los camiones y tanques que ya tenemos instalados en Cusco para empezar con la distribución residencial”, reveló Saenz-Laguna.
Precisó que este proyecto se halla en evaluación junto con Pluspetrol, empresa con la que Lima Gas viene “ajustando algunas cosas”, mientras buscan los mecanismos adecuados para su ejecución.
“Creemos que es un proyecto que tiene mucho sentido y que puede ser de rápida implementación. Por tanto, esperamos que en el corto plazo podamos tener buenas noticias”, apuntó Saenz-Laguna.
En el mismo sentido se pronunció Pablo Campana, Gerente de Grandes Clientes, Pluspetrol (Consorcio Camisea).
“Estamos pensando en cómo llevar este proyecto, uno o dos escalones más, pensando no solo en los vehículos convertidos y taxis sino en otros segmentos como los buses de trasporte y las redes de distribución residencial”, dijo.
MINEM Y EL GOBIERNO REGIONAL
Jean Paul Benavente, gobernador regional del Cusco, fue claro en señalar que la masificación del gas natural es fundamental para cambiar la matriz energética de su región que hoy sufre por su dependencia del GLP, energético cuyo precio sobrepasa los S/50 o S/60, a diferencia del gas natural, que “tiene precio regulado y por tanto no está sujeto a los precios internacionales”.
En tal sentido, expresó que la implementación de los tres primeros grifos de GNV en Cusco es el punto de partida para soñar en una masificación del gas.
Al respecto, puntualizó que el gobierno regional y el Ministerio de Energía y Minas han firmado un convenio que compromete a ambas partes a dar los pasos necesarios para “aprovechar el gas de Camisea en Cusco, mediante la promoción, desarrollo, seguimiento, monitoreo y posterior consecución de proyectos de instalación del gas natural en los domicilios”.
“Ya ha habido una visita, hemos tenido la suerte de que los mismos expertos de Lima Gas y el Consorcio Camisea (Pluspetrol) puedan plantear recomendaciones a los especialistas del Minem, para definir una hoja de ruta en este proceso de masificación”, indicó.
Añadió que para plasmar esta idea, están pensando en formar empresas municipales o en convocar a Petro-Perú o a las empresas que conocen de distribución, incluyendo a las empresas eléctricas.